¿Quién tiene algún corcho de vino por casa? Seguramente habéis visto todas las posibilidades que tienen, hoy os enseño lo fácil que es hacer Servilleteros con Corchos. Es tan fácil y tán rápido de preparar que es una #manualidadexpress de esas que tanto nos gustan.
¿Qué necesitamos?
- Un corcho por cada servilletero que queramos hacer
- Alambre
- Cuentas/ abalorios de colores
Paso a Paso
Para hacer nuestros servilleteros con corchos lo primero que hay que hacer es insertar una punta del alambre en uno de los lados del corcho.
El alambre no debe ser demasiado fino o no tendrá fuerza para entrar en el corcho y se nos doblará, aún así os doy un consejo para asegurarnos que no salga con facilidad: hay que ir introduciendo el alambre haciendo vueltas, el mismo movimiento que haríamos si estuviéramos introduciendo un sacacorchos, así el alambre irá entrando en forma de espiral y será mucho más resistente.
Nosotras no hemos pintado los corchos (qué podéis hacerlo con temperas o pintura acrílica) por dos razones: esto es una manualidad express y así es más rápido de tener listos nuestros servilleteros; y porque el contraste del rústico del corcho con las cuentas brillantes y coloridas me gustaba.
Una vez tengamos el alambre bien metido en el corcho pasaremos a ir llenando de cuentas y abalorios, la largura del alambre dependerá de cómo de estrecha queramos presentar en la mesa nuestra servilleta.
Este es el paso que desde bien pequeños los peques pueden hacer solos, reforzamos Motricidad Fina, hablamos de colores, podemos intentar crear series, imitar patrones o crear libremente. Lo importante es divertirse y crear en familia, además del orgullo de presumir de la creación en las cenas y comidas familiares.
Al acabar de insertar todos los abalorios, volveremos a repetir el primer paso,cerrando nuestro servilletero fijando la otra punta del alambre en el otro lado del corcho.
Ahora te que tenemos nuestros servilleteros listos, solamente hay que poner la mesa, colocarlos y a disfrutar de las reuniones familiares y con amigos, con un toque personal y hecho por los peques: nuestros servilleteros con corchos de vino.
Mas que un servilletero a mi me pareció una pulsera,que también valdría,sería una opción 🙂